Si estás buscando la última imagen del Sur de California, no busques más, esa es The Runaways, cinco dulces jovencitas de 16 años de edad, que personifican el despertar del marchito Rock'n'roll de Hollywood.
Pero, espera un minuto. Estas pollitas alzan el vuelo más allá del estilo de rock estridente que se podría oír en un pub de South London cualquier noche de la semana. Eso es porque son la creación de dos de los más notorios anglófilos de Hollywood.
Rodney Bingenheimer y Kim Fowley son los espabilados de Hollywood que han juntado a The Runaways. A las chicas les salieron sus dientes de leche en el local de Rodney, English Disco y el productor Kim Foley dirigió la carrera de las chicas hacía un contrato de grabación con Phonogram, además de ser el compositor de siete, de las diez canciones de su primer álbum.
Naturalmente, las chicas tienen sus propias influencias. La guitarra solista Lita Ford (actualmente tiene 17 pero no lo dice) va en la onda de los primeros discos de Led Zeppelin y Black Sabbath. La bajista Jackie Fox es una fiel devota de Kiss y Aerosmith. Y basta con hechar un vistazo a la guitarrista Joan Jett y su aire a lo Suzi Quatro y a la cantante Cherie Currie y su corte de pelo a lo Ziggy para saber de donde vienen.
The Runaways dan un nuevo impulso al conflicto generacional. "Ponemos nuestros sentimientos en la música de una manera que un hombre de 30 años no podría. Pueden cantar sobre los adolescentes y escabullirse por la noche. Pero en realidad no tienen ni idea", dice Cherie.
"Quiero decir, los tipos de 30 años no tienen que salir de noche a hurtadillas de sus madres", añade Joan Jett amablemente.
(Escrito en el New Musical Express en septiembre de 1976)
(Kim Folley, web)
Para Marta, Inés, Iria, Serena, _V_, Mariaje, Isa, Noelia, Silvana, Merichel, Borja, Rubén, Marky, Turkish, Fernando, Carlitos.
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