Desde el día 3 de mayo está disponible en España el nuevo disco de estos chicos por los que apostamos duro en la primavera de 2008 y que al final acabaron convirtiendose en la sensación del año. Nuestro compañero y amigo Del Jardín nos orienta sobre el grupo y su nuevo trabajo que al igual que su precedente, levanta pasiones. Y la prueba está en que nuestro colaborador Judge Borja también nos ha envíado una crónica de este álbum, "Que me ha sorprendido positivamente", ha comentado, que publicaremos a continuación de esta, -para acceder a ella, pincha aquí-. Da la impresión que se hayan puesto de acuerdo, cosa que sé a ciencia cierta que no es así.
¿Conocen la historia de Fleet Foxes?
Robin Pecknold, líder del grupo y compositor de todas las canciones, nació en Seattle, una ciudad muy lluviosa, ocho años antes de la muerte de Kurt Cobain. Desde pequeño sufría continuas alergias que le impedían salir de casa en meses. Alejado del mundo, se sumergía en el suyo propio con canciones de Bob Dylan, Paul Simon y Joni Mitchell. Más tarde descubriría a Fairport Convention y a Roy Harper, siendo éste una de sus principales influencias. Ya en el instituto conoció a Skyler Skjelset, que tocaba la guitarra, y decidieron montar un grupo. Grabaron su primer EP, de título homónimo, y se unió a ellos el teclista Casey Wescott, por entonces en una banda punk-rock de Seattle llamada Seldom. Pero este EP pasaría sin pena ni gloria.
A principios de 2007 volvieron a entrar en el estudio para grabar junto a Phil Ek (Built to Spill, The Shins, Band of Horses) su primer disco, "Fleet foxes", y el EP "Sun giant" que se publicaría primero. En ambos crearon un tratado de folk que remite a otro tiempo y a otro lugar con unos coros sorprendentes embebidos de espiritualidad. Mención especial para la portada del disco, un cuadro de Peter Bruegel "el viejo" ("Los proverbios flamencos") que refleja el estilo barroco de su música. Entonces se echaron a la carretera y es ahí cuando se unen a la banda Joshua Tillman, que por aquel entonces ya tenía cuatro discos publicados y con el que ganaron una excelente voz y un excelente batería, quizás el mejor músico de ellos, y Christian Wargo, el bajista, que pertenecía a Crystal Skulls, un grupo de indie-pop también de Seattle. Después de recorrer Estados Unidos junto a Blitzen Trapper, girarían con algunos artistas admirados por ellos como Beach House, The Clientele o Dungen, hasta compartir cartel con Jeff Tweedy y compañía. Sus canciones hablan, a grandes rasgos, de la vida y la muerte pero a diferencia de Kurt Cobain o Elliot Smith, dos grandes figuras de la música de Seattle, no comparten esa actitud negativa y torturada.
El álbum fue aclamado por la crítica. Spin lo definió como "Un espléndido cuadro de bosques lejanos" y Paste Magazine dijo de él que "Es como ver el sol ascender sobre las distantes cimas montañosas, familiar y cautivador al mismo tiempo". "Puro placer" afimaba Q Magazine y Drowned in Sound no se equivocaba al decir que es "Un disco que no abandona el equipo de música". La revista Uncut les concedió el "Uncut Music Award" por delante de Elbow, Radiohead y Vampire Weekend, y fue "Álbum del Año" para Mojo y para Pitchfork. Bien, pues éste es su continuación. Así que vayan y cómprenselo antes de verlo publicado en las listas del próximo enero de lo mejor del año.
http://fleetfoxes.com/
En este reproductor se puede escuchar el disco "Fleet Foxes" y el EP "Sun Giant", ambos de 2008. El nuevo "Helplessness Blues", se puede escuchar en el post de Judge Borja, pinchando aquí.
Sí quieres acceder a las selecciones musicales de Del Jardín en Myspace, pincha aquí. También hay un enlace permanente en este blog, en el margen derecho.
Quiero reiterar las gracias a Del Jardín por haberme regalado el último Cd de Fleet Foxes.
Para Ricardo, Pablo, Jose T., Marta, Natalia, Inés, Jesús, Juan.
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